MEDICINA CUANTICA

El Empleo de la Electricidad y el Magnetismo en Medicina, Dr. Oschman

by on Nov.30, 2009, under Los Campos Energéticos, Medicina, Medicina Natural, Merodeando en Libros

Si se fractura un hueso en un brazo o en una pierna, y no logra sanar a los 3/6 meses, existe una gran posibilidad de que su médico le prescriba un método energético denominado terapia del campo electromagnético pulsado, o PEMF (en inglés: pulsed ectromagnetic field). Le extenderán una receta por un pequeño generador pulsado a baterías conectado a una bobina que deberá colocar cerca de su lesión, durante 8/10 horas al día. El aparato produce un campo electromagnético que induce a las corrientes a fluir a los tejidos circundantes. La inducción es le proceso por el cual los campos magnéticos provocan que las corrientes fluyan en los conductores cercanos. Es la base de los transformadores y otros aparatos eléctricos. Las leyes que gobiernan la inducción han sido la piedra angular de la física e ingeniería eléctrica por mas de un siglo. Los exámenes clínicos han demostrado que la terapia por el método del PEMF inicia de inmediato la reparación del hueso. La investigación del médica ha revelado que las campos magnéticos “pueden convertir un proceso sanador que quedó atascado hace más de 40 años” (Bassett 1995). Por la tanto, la ciencia occidental finalmente ha confirmado y aceptado un concepto que fue parte de la medicina energética tradicional durante miles de años.

La idea de iniciar de inmediato un proceso de sanación es familiar a toda aquella persona que se haya dedicado al trabajo corporal energético o a las terapias de movimiento. Es fascinante seguir la saga de cómo se descubrió el enfoque energético respecto de la sanación ósea, aceptada como terapia, rechazada y reinstalada por la comunidad médica.

EL EMPLEO MODERNO DE LOS CAMPOS MAGNÉTICOS PARA ESTIMULAR LA REPARACIÓN DE HUESOS COMENZÓ POCO DESPUÉS DEL DESCUBRIMIENTO DE LA “ELECTRICIDAD ANIMAL”, A FINES DEL SIGLO XVIII. A mediados de 1800, el método preferido para tratar la sanación lenta de las fracturas era pasar electricidad por agujas implantadas quirúrgicamente en la región de la fractura. La técnica fue desterrada por la práctica médica, junto con electroterapias no demostradas. A comienzos de 1900.

E las décadas de 1959 y 1960 se produjo un resurgimiento del interés médico por la terapia eléctrica y magnética. Luego de un considerable esfuerzo por parte de los científicos, en una importante cantidad de centros de investigación (Brighton y otros 1981, Bassett y otros 1982), se le otorgó, tanto a la terapia eléctrica como a la magnética una clasificación “segura y eficaz” por parte de la FDA (Food & Drug Administration) para las fracturas “que no se unían”. A fin de alcanzar este estado, se realizaron muchos estudios para documentar el éxito, la falta de efectos colaterales y los mecanismos que emplean métodos con campos magnéticos.

NO RESULTA SORPRENDENTE QUE LA EVIDENCIA CIENTÍFICA SEA QUE LA TERAPIA PEMF E EFICAZ PORQUE TRANSMITE “INFORMACIÓN” QUE IMPULSA ACTIVIDADES ESPECÍFICAS DE REPARACIÓN DENTRO DEL CUERPO. Las corrientes inducidas en los tejidos por la terapia del PEMF, imitan las actividades eléctricas naturales creadas dentro de los huesos durante los movimientos. El hecho de pulsar campos magnéticos inicia una cascada de actividades, desde la membrana celular hasta el núcleo y luego a nivel del gen, donde se producen los cambios especificos. (Bassett 1955).

FUENTE: Medicina Energética, la Base Científica del DR. James Oschman



:

Comments are closed.

BUSQUEDA BLOG